Una ventana abierta al cambiante mundo y el esfuerzo por tratar de ajustarse a esa realidad fugaz, a la que llamamos Vida

domingo, junio 29, 2008

Los ríos de la vida, la muerte del mar

No es una adivinanza. Cuando estudiaba el bachillerato en una escuela privada -Colegio La Luz en el Vedado-, la maestra de literatura nos hizo leer las Coplas de Manrique (aquellas famosas de "recuerde el alma dormida....y nuestras vidas son los ríos que van a dar a la mar que es el morir.....") entonces no pensaba en mi mortalidad. Hace cinco años cuando me diagnosticaron Diabetes Mellitus del tipo 2, me cayó una depre y me convertí durante dos años en un "Health freak" al decir de Lourdes una trabajadora social que laboraba en la misma agencia. Bajé de peso en tanto varié la dieta (cero azúcar, pocos carbohidratos) y caminaba dos veces al día y por ende los niveles de glucosa bajaron. Entonces todo regresó a la normalidad pues sabía que no me iba a morir de un coma diabético.
Hace unos meses mi esposa fue diagnosticada con Hipotiroidismo y esté pasando por la misma crisis al ver amenazada su hasta ahora intocable mortalidad.
Bueno, somos mortales y de algo hay que morirse.
Por mi parte no soy religioso y no creo ni en el cielo ni en el infierno. Cuando trabajaba en la Arquidiócesis de Miami un colega norteramericano que había dejado el Seminario me dijo "El infierno y el cielo lo llevamos dentro de nosotros". No es un lugar físico, está dentro de cada uno. El alma se lleva su pedazo de premio y castigo para rodar quién sabe por que Galaxia o "hueco negro". Basta ya de especulaciones filosóficas. Nunca he sido un filósofo. Soy bastante heterodoxo, tomo lo que cada cual ha aportado a ese mar del conocimiento humano y lo paso por el filtro de mi endeble cerebro.
"Al cabo nada os debo", como decía el gran maestro Antonio Machado.

Wesbri, sudado, luego de una caminata de una hora.
Este comentario no lleva foto. La muerte no se puede retratar, la depre es una enfermedad crónica o transitoria y hay que respetar a quienes la sufren. El alma "dormida" sin el "seso avivado" yace en su propio mundo junto a la Divinidad, Dios, God, Bog, Dieu, etc etc etc. o espera unirse a ella una vez que abandone el cuerpo material.

3 comentarios:

Anonymous Anónimo ha dicho...

No seas cruel

6:36 a. m.

 
Anonymous Anónimo ha dicho...

Muy interesante blog lo leo todos los dias

Magda

6:37 a. m.

 
Anonymous Anónimo ha dicho...

Saludos¡ Me gusta este post, por eso escribo en él después de leer los anteriores. Gracias por pasar por Papelbit y dejar su opinión.

1:29 p. m.

 

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