Beer Diplomacy
Barrack Obama acaba de hacer historia. Pasarán siglos y será recordado por su invemción de la diplomacia de la cerveza (siglas BD en inglés). Antes de entrar en detalles debo aclarar que cuando hace ya más de tres años decidí perder horas matutinas en este nefasto pasatiempo del bloguerismo, la foto mía en el Perfil era precisamente sentado frente a una jarra de cerveza fría en un verano caliente en Figueres, Cataluña, en un bar situado frente al Museo Salvador Dalí. Digo esto ya que considero que una buena cerveza fría es el mejor argumento del mundo para limar asperezas.
Ahora los antecedentes del caso.
1-El profesor negro de la universidad de Cambridge Henry Louis Gates, JR (en lo adelante junior) regresa de un largo viaje académico a China (creo que son más de 20 horas de vuelo) con un acompañante masculino (amigo, secretario, vaya a saber) y se encuentra con la puerta de su casa trabada. Entre los dos hombres de la raza negra tratan de destrabar la puerta y el ruido a altas horas de la noche se hace sospechoso a sus vecinos que llaman a la policía.
2-El sargento Joseph Crowley (en lo adelante el sargento) llega en su patrullero y se enfrenta a dos hombres negros dentro de la casa sospechosa. Median palabras, junior se incómoda, sargento se incomoda, insultos vuelan despavoridos en la noche intensa y el sargento pide refuerzos. Arrestan y esposan al profesor (junior) y el incidente recorre el planeta. La fiscalía desecha los cargos, junior sale libre, pero la palabra prohibida ha sido desvelada: racismo, profiling, o sea parar e interrogar a alguien por el color de la piel.
3- Liberales de un lado. Conservadores del otro. Hasta el mismo Obama hace alusión al hecho y declara que el arresto momentáneo de su amigo personal junior fue "un acto estúpido de la policía". Mayor furror, las asociaciones de policía de este planeta y de otros por descubrir protestan y arrojan más leña al fuego de un Estados Unidos Post Racial que aún conserva momentos de diferenciaciones raciales.
4.Barrack Obama crea una nueva diplomacia. Beer Diplomacy (BD, en lo adelante) e invita a las dos partes litigantes a tomar cerveza en el Rose Garden.
Hasta aquí la historia.
Ahora yo me pregunto ¿por qué el Presidente Arias no invita a Zelaya y a Micheletti a Tabacón a tomar cervezas junto a la estoica majestuosidad del volcán Arenal?
¿Por qué la OEA no invita a los presidentes Uribe y Chavez a tomar cerveza en el Salto del Angel?
Y ahora la más difícil: ¿por qué el Santo Padre no invita a Panfilo de La Habana y al general Raúl Castro a tomarse unas laguers en el muro del malecón?
Os juro y perjuro que de hacerlo el mundo sería un remanso de paz con unas libritas en exceso y el aliento etílico en la sonrisa feliz.
Wesbri
3 comentarios:
La cerveza es la prueba d q Dios nos ama, y quiere q seamos felices.
Benjamin Franklin.
Saludos desde mi rincón del Mundo.
8:11 p. m.
Bravo!!!
"24 horas tiene el día, 24 cervezas tiene una caja. ¿Coincidencia?"
5:46 a. m.
Sería la diplomacia y el poder de la cerveza que no solo se sube a la cabeza.
7:58 a. m.
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